La seguridad en el lugar de trabajo es principalmente responsabilidad del empleador. Sin embargo, no importa cuántas medidas se tomen, solo se puede lograr un entorno laboral seguro si los empleados las implementan.
Por lo tanto, es esencial crear y fomentar una cultura de seguridad que proteja principalmente a los empleados, pero que también mejore la productividad y el bienestar general.
Aquí hay algunas estrategias que pueden implementarse desde las perspectivas de empleadores y empleados para lograr este objetivo.
Para Empleadores
Liderazgo: La empresa debe demostrar un firme compromiso con la seguridad implementando políticas claras, asignando los recursos adecuados y modelando constantemente comportamientos seguros.
Comunicación: Si las normas de seguridad no se comunican abiertamente a los empleados, es como si no existieran. Además, esta comunicación debe ser bidireccional para que los trabajadores puedan reportar sus preocupaciones, hacer sugerencias y compartir información sobre incidentes pasados para aprender de ellos.
Capacitación y Educación: La capacitación regular para los trabajadores es esencial para mantenerlos informados sobre los procedimientos de emergencia, el uso adecuado del equipo de protección personal y el manejo de materiales peligrosos y maquinaria.
Identificación de Riesgos: Es vital inspeccionar el lugar de trabajo y los métodos de trabajo para identificar posibles riesgos y idear medidas para mitigarlos.
Reconocimiento y Recompensas: Implementar un programa de incentivos o bonificaciones para trabajadores que se comprometan excepcionalmente con las medidas de seguridad.
Para Empleados
Cumplimiento Activo: Asegurarse de seguir correctamente las políticas y procedimientos de seguridad para minimizar las lesiones relacionadas con el trabajo.
Reporte de Incidentes: Informar sobre cualquier incidente o riesgo potencial a un supervisor, sin importar cuán grave o pequeño sea.
Participación Activa: Participar activamente en las sesiones de capacitación en seguridad y compartir sugerencias para posibles mejoras en el lugar de trabajo.
En resumen, la educación sobre seguridad, la disponibilidad de recursos y un entorno de trabajo seguro son responsabilidad del empleador. Sin embargo, todos los empleados pueden ser agentes de cambio para mantener un lugar de trabajo seguro y libre de incidentes.